Continuando con esta reflexión, les traigo la tercera parte referente a la labor de los padres en la decision de la carrera universitaria de sus hijos.
EL DILEMA DE LOS PADRES
Cristián Pizarro estudió Licenciatura en Historia y al año de haber egresado le ofrecieron trabajar como visitador médico. Su padre lo criticó por cambiarse a una actividad tan distinta. Pero Cristián notó que si quería tener un mejor nivel de sueldos debía aceptar ese trabajo. Estudió biología y química por su cuenta y en el laboratorio también lo capacitaron. Su habilidad para manejar temas con los médicos, sobre arte, historia, política, le dio un plus. Ahora es gerente de la unidad de negocios del laboratorio Merck. Y con el tiempo se dio cuenta de que quizás la elección de su carrera la hizo sin pensar demasiado en el futuro.
"Uno debe hacer el cálculo", dice. "El problema es que a los 17 años uno no tiene las cosas claras. Se obliga a los jóvenes a elegir una carrera que termina siendo crucial para sus vidas sin pensar en la rentabilidad a futuro. Tengo un hijo de esa edad, le puse un hunter para que vea qué quiere hacer. Si no está claro, que se tome un año, estudie un año inglés u otra cosa, y vea".
La clave es esa: escoger una carrera que permita desarrollar potencialidades.
"Primero, el alumno debe entender que será muy difícil volver a tener 4 o 5 años para dedicarse a aprender. Al menos a un costo tan bajo", dice Carlos Albornoz, de la UDD. Y añade: "Tengo un hermano que luego va a dar la PSU y me preguntó qué estudiar. Le recomendé que ingresara a cualquier carrera que le asegurara matemáticas, gestión, comunicación oral y escrita; que conociera la 'industria' donde funciona esa carrera, y que luego juntara plata y estudiara un posgrado. La clave de su futuro profesional se la darán los dos primeros trabajos que tenga".
¿Cuál sería el consejo para padres e hijos, entonces, para rentabilizar una carrera universitaria? ¿Qué elementos tomar en cuenta y cuáles no? Angélica Hurtado, de Grupo Cinco, entrega los más importantes, de acuerdo a la experiencia que tiene con las empresas que buscan nuevos profesionales.
"Lo primero es estudiar seriamente. Lo segundo, desarrollar una red profesional con el profesorado desde la universidad mediante las ayudantías o la investigación. Tercero, tomar ramos de otras carreras para ampliar su enfoque y relacionarse con otro tipo de estudiantes. Cuarto, fortalecer el idioma inglés. Y quinto, vivir en otro país (en un intercambio, práctica de tres meses, posgrado, trabajo afuera) con el fin de poseer una experiencia que le implique conocer otra realidad y formas de pensar".
El resto se trata de talento, vocación y trabajo.
Daniella González
Tutora
Tutora
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